Clark Kent se dispone, como cada mañana, a ir a la redacción del periódico. Se ajusta la corbata, se coloca las gafas y sale de casa. De repente, un gran cataclismo va a destruir el mundo. Y él, ni corto ni perezoso, se quita las gafas, se desanuda la corbata, salva el planeta y continúa su camino para terminar de escribir el artículo que le encumbrará como reportero.
Este periodista de tebeo, nada tiene que ver con Arcadi Espada, profesor de periodismo en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona. También es autor de numerosos artículos y libros, tales como "El terrorismo y sus etiquetas".
Arcadi Espada estuvo el lunes 19 abril en el Aula de Literatura y Pensamiento Rafael Pérez Estrada del Centro de Arte de Málaga, donde impartió la conferencia "Aly Herscovitz. Cenizas en la vida europea de Josep Pla". En su ponencia, nos presentó la figura del periodista catalán y su relación con el Holocausto, ya que su novia Alma Herscovitz murió en un campo de concentración. Para Espada, este periodista no cumplió con el compromiso ético de estar presente durante el juicio que se le hizo a Eismann en Jerusalem al no sentirse preparado para estar allí.
La crítica del periodista contemporáneo, Arcadi, hacia su antecesor, Pla es "que el escritor no se impuso al hombre". En este caso, ¿ganó el miedo, el dolor?. No lo sabemos, pues, aunque los silencios forman parte de la comunicación son difíciles de interpretar.
La historia le reconoce el hecho que dejó a la vista el extremo de la cuerda, pero han sido otros los que tiraron del ovillo. Durante tres años un grupo de escritores españoles, Sergio Campos, Eugenia Codina, Marcel Gascón, Xavier Perica y Arcadi Espada dispersos por toda Europa y desde ciudades tan lejanas como Barcelona, Berlín, Bucarest, Rotterdam y Palma de Mallorca, han aunado esfuerzos y entre todos han recogido las cenizas de Aly para que no se las llevara el viento del olvido.
El resultado de esta investigación se encuentra en la red en http://www.alyherscovitz.com/. No se imprimirá en papel, está disponible on-line para suscriptores.
Como cada noche, ClarK Kent se va volando con su capa roja surcando los cielos de metrópolis. Mientras, Arcadi Espada apaga el portátil y se va a pie hasta su casa.
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