Me gustaría que vieras primero este vídeo de la película Flash Dance... ¿Ya has vuelto? Pues ahora pon los pies en el suelo y acuérdate de que mañana es lunes, que tienes que volver a la dura realidad de cumplir objetivos para llevar el pan a tu casa.
A tu realidad de divorciad@ o solter@ por decisión propia y frega los platos que se acumulan en la pila. Intenta olvidar cualquier desliz que la bebida o la motivación del momento te haya hecho realizar. No te sientas culpable. Y apúntalo en tu agenda de memorables, aunque hayas hecho el canelo.
Pon los pies en el suelo para coger equilibrio y seguir bailando, no hacen falta dos para llenar el escenario. Este vídeo es un buen ejemplo de esfuerzo y motivación en soledad. Lo hago por mí, porque me gusta, porque me llena y porque tenemos 15 minutos de gloria en esta gran obra llamada vida. Como buena escritora me salto el libreto e intento improvisar. Aunque no siempre se me entiende o se me ve demasiado a las claras.
Estas navidades serán raras para mí, posiblemente pase fin de año sola, aunque ya estoy buscando quien me adopte. Aunque sea para el sábado ir a dar una buena caminata al paseo marítimo. Soy de gustos sencillos, nací en una casa de pobres y numerosos. Así que cuando alguna vez la noria giró no me creí del todo el cuento de Navidad. Ricos o de clase media alta, en el que alguna vez aterricé por equivocación. Nunca me lo creí, ni me lo creo. La fe me la guardo para otros milagros: salud, tener un trabajo digno, que me permita conciliar la vida familiar, sin tener que comprar regalos caros para tapar el sentimiento de culpa.
No... No pares de bailar, ponte el vídeo otra vez y siente la energía o el subidón de la superación personal, limpiamente, sin pisar a nadie, ni darle patadas a la ética. ¡Bailad, bailad! Aprovecha y enciende las luces del árbol de navidad.¡Bailad, bailad!
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